Una nueva investigación publicada por el Consumer Choice Center (Centro de Elección del Consumidor) y World Vapers Alliance (Alianza Mundial de Vapeadores) muestra que 15 millones de exfumadores de ocho países podrían volver a fumar si se promulgan las prohibiciones de los sabores del vapeo de nicotina.
El informe “Why Vape Flavors Matter?” analizó la situación en 8 países (Estados Unidos, Canadá, Holanda, Polonia, Alemania, Francia, España, e Italia). De acuerdo con este, hay tres consecuencias negativas de prohibir los sabores en el vapeo:
1. La prohibición llevará a los vapeadores a comprar productos de vapeo con sabor en otras jurisdicciones legales;
2. Los vapeadores podrían recurrir a comprar productos de vapeo con sabor en el mercado ilegal;
3. Los vapeadores podrían volver a fumar.
El análisis también encontró que los vapeadores que usan sabores distintos a tabaco son 230% más propensos a dejar de fumar que aquellos que usan solo sabores de tabaco.
Reacciones al estudio
Michael Landl, director de la Alianza Mundial de Vapeadores, dijo que “prohibir los sabores tendría un efecto profundamente negativo en la sociedad, empujando a los fumadores de vuelta a los cigarrillos o al peligroso mercado negro. El vapeo es una herramienta muy eficaz para dejar de fumar y los sabores son una parte integral del éxito. La prohibición de los sabores podría hacer que millones de exfumadores volvieran a tomar el hábito”.
David Clement, director de Asuntos Norteamericanos del Consumer Choice Center, añadió: “Lo que queremos que la gente, especialmente los legisladores, reconozcan es que los sabores que se van formando no solo tienen que ver con el sabor y la comodidad para los usuarios adultos: son un factor importante para que la gente deje de fumar de forma tradicional”.
En el informe también se examinan otras consecuencias negativas de la prohibición de los sabores. Estas incluyen acceder a los mercados negros o fabricar sus propios líquidos de vapeo. Esto último puede ser muy peligroso si la persona no cuenta con el conocimiento y los ingredientes adecuados.
“Sabemos que las prohibiciones de los sabores reavivan los problemas de la prohibición, lo cual es un neto negativo para la sociedad, tanto en lo que respecta a la actividad delictiva como a la seguridad de los consumidores”, dijo Yaël Ossowski, director adjunto del Consumer Choice Center. “A la luz de todas estas pruebas, países como los Países Bajos o Dinamarca deben reconsiderar sus planes sobre las prohibiciones de los sabores y, en su lugar, facilitar al máximo a los fumadores el cambio a alternativas menos perjudiciales en comparación con el tabaquismo”, dijo Michael Landl.
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