Resumen: 
Ofrecer incentivos para que los profesionales de la odontología ingresen a la profesión y practiquen más en las áreas donde más se necesita atención es, de hecho, un objetivo valioso. Sin embargo, no está claro cómo la terapia dental logra esto. Como demuestran los ejemplos a nivel mundial y en los Estados Unidos, agregar un programa de terapia dental no brinda los resultados prometidos, sino que aumenta los costos tanto para los contribuyentes como para los consumidores.

Desafortunadamente, no es el programa bala de plata del libre mercado como se ha anunciado. Para los consumidores, es importante encontrar la mejor solución que beneficie a la mayor cantidad de personas en los lugares de interés. Lo que se puede hacer de inmediato, sin crear una categoría completamente nueva que podría llevar años desarrollar, es permitir que más dentistas lleven su trabajo a la calle y abran clínicas móviles. Eso daría a más pacientes acceso a los dentistas y, con suerte, estimularía nuevas innovaciones tecnológicas que aumentarían más la atención dental. Otra sería dar a los dentistas que ya tienen licencia más incentivos para trabajar en áreas rurales, como el alivio de la deuda que se ha avanzado en estados como Florida.

Eso podría contribuir en gran medida a reclutar más dentistas en todo el país para ayudar a llenar los vacíos de escasez que existen en muchas comunidades. Por encima de todo, esas serían las mejores y más rápidas soluciones para los consumidores en los Estados Unidos.